Conectar con los sentimientos y captar los pequeños detalles de cada situación puede ser una ventaja pero las PAS se sienten un poquito raras en este mundo que no valora la sensibilidad.
Las Personas Altamente Sensibles (PAS) son las que captan los pequeños detalles y matices de todo, delicadas e hipersensibles con un grado de compromiso elevado ante cualquier cosa que hagan. Es por ese elevado grado de sensibilidad que suelen requerir desconectarse del entorno y aislarse de vez en cuando, disfrutando de la soledad y eliminando así, estímulos que les afecten sobremanera.
Son personas que están muy habituadas a escuchar comentarios como: “¡qué sensible eres!”, “¡tampoco es para tanto!”. Les afecta todo lo que sucede en el mundo (no sólo lo que le pasa personalmente o a su entorno) sino cualquier cosa que pasa y suelen actuar de forma algo más exagerada, por lo que pueden llegar a ser objeto de crítica o incomprensión.
Un ejemplo sería aquellas personas que se emocionan y lloran viendo el noticiero o las que viven las películas como si fueran protagonistas de la misma. Además, pueden ser personas especialmente sensibles a los ruidos molestos como escuchar a alguien masticar o una tos nerviosa.
Es importante aclarar que las PAS no son personas que están todo el día llorando o riendo sin poder controlarse. Más bien todo lo contrario, tienen la gran habilidad de sentir las emociones sin tapujos pero también tienen un gran autocontrol, muchas veces propiciado por las exigencias de la sociedad que les hace sentir diferentes.
¿Cuáles son las principales características de las PAS?
Son personas muy empáticas y con una gran intuición: Son capaces de escuchar a la otra persona y vivir lo que le está contando el otro como si fuera el protagonista de la historia. Se ponen en la piel de los demás y cuando escuchan los argumentos, dan consejos desde lo que a la otra persona le puede venir bien y no desde el propio punto de vista.
Además, son personas altamente intuitivas y detallistas; Son los primeros en darse cuenta de que te has cortado el pelo o llevas unos pendientes diferentes y detectan tus estados emocionales aunque intentes disimularlo. No sabes como lo hacen pero si estás triste, aunque intentes aparentar normalidad, te preguntará: ¿te pasa algo?
Son personas reflexivas y con un procesamiento de la información profundo: Tienden a darle vueltas a las cosas, a analizarlas, pero de forma fructuosa. No son de pensamientos cíclicos sino de desmenuzar mucho un tema para poder sacarle el máximo partido y así extraer las conclusiones más acertadas.
Tienen un gran conocimiento de las emociones: Son personas capaces de vivir desde el corazón y no tanto desde la razón, es decir, tienen un amplio vocabulario sobre emociones, las conocen, las manejan, se las permiten y cuando hablan suelen utilizar las frases: “siento que”, en lugar de: “lo que yo pienso”. Al contrario del resto de humanos que tratamos de ocultar las emociones y hacer como si no existieran, las PAS se las permiten y disfrutan de ellas, dotándose así de una gran inteligencia emocional.
Son capaces de disfrutar de la soledad: Este rasgo seguro que será envidiable para mucha gente, que no puede permitirse estar sola porque le abruma ese sentimiento y necesitan llenar las horas de actividades o hacerlo todo con alguien. Así, del mismo modo que son personas muy capaces y aptas para trabajar en equipo (por lo que he comentado antes de su alta capacidad de empatía), son personas que disfrutan de la soledad y de su mundo interno. No son personas que necesitan llenar el horario de actividades para hacer y así no pensar, sino que son capaces de disfrutar de la soledad y de sí mismas.
Les agobia la sobre-estimulación: Como son personas que detectan los pequeños matices, entornos o ambientes donde hay sobre-estimulación son circunstancias que tienden a evitar debido a que hay un exceso de información a procesar para ellos y se agotan en exceso. Prefieren ambientes tranquilos con pocos estímulos para poder disfrutar de ellos sin abrumarse. Así, siempre van a preferir una reunión de pocos amigos a grandes cenas con muchas personas.
¿Por qué podemos considerar a las PAS personas afortunadas?
- Son capaces de afrontar mejor sus problemas
- Saben escucharse y atienden a sus necesidades en todo momento, de manera que se mantienen en un equilibrio emocional envidiable
- Expresan su sensibilidad sin problemas y sin provocar inconvenientes en el entorno
- Tienen una mejor autoconfianza y por tanto, una mejor autoestima
- Hacen uso de la empatía de forma correcta
- Ayudan a los demás sin perder su propio equilibrio emocional
- Saben trabajar en equipo y se priorizan cuando es necesario
- Tienen relaciones de calidad y duraderas basadas en el respeto y la comprensión
- Son capaces de frenar sus pensamientos obsesivos
No obstante, ser una PAS puede ser una gran ventaja pero también les lleva a sentirse bichos raros, ya que son capaces de captar cosas que nadie más capta y la tendencia es a ocultar estas habilidades y a sentirse incomprendidos. Muchas veces son considerados como personas frágiles y vulnerables porque se tiende a confundir la sensibilidad con la fragilidad y ellos se frustran porque son personas muy exigentes con el entorno.
En conclusión me gustaría decir que todos tendríamos que hacer una reflexión personal y aprender un poco de estas personas en lugar de juzgarlas, ya que son personas privilegiadas. Y si te sientes identificad@ con una PAS, no lo ocultes, disfruta de ello y del don que tienes.
